(*El cuerpo real de la Señora de Cao está exhibido en el Museo Cao)
En el año 2005, en un recinto ceremonial de la Huaca Cao Viejo, en el Complejo Arqueológico El Brujo, se descubrió la tumba de la Señora de Cao.
Las insignias y emblemas que llevaba la Señora de Cao al interior de su fardo funerario (coronas, diademas, porras, narigueras, collares, entre otros) fueron símbolos de poder en su época e indican que fue un personaje muy importante en la estructura social mochica.
Este hallazgo arqueológico es único en su clase en América Prehispánica pues por primera vez se registró un ajuar funerario de esta naturaleza asociado a una mujer.
La Señora de Cao vivió entre el 300 d.C. y el 400 d.C.; y se considera contemporánea al Viejo Señor de Sipán. Tuvo una estatura aproximada de 1.48 m. y de acuerdo a las características de su vientre, se estima que murió poco después de dar a luz, entre los 25 y 30 años de edad.
Gracias a la utilización del cinabrio (sulfuro de mercurio), una sustancia tóxica empleada con fines rituales, así como a las condiciones de conservación del recinto en donde se encontró, los restos de la Señora de Cao fueron preservados por más de 1,700 años.
Sin embargo, para garantizar la debida preservación del cuerpo de la Señora de Cao en el futuro, se ha producido una réplica de esta invalorable evidencia arqueológica mediante tecnología 3D, proyecto que permitirá difundir este hallazgo, así como promover su observación y estudio, para el beneficio de las futuras generaciones.